Las dos me sorprenden,me hacen (al menos por unos instantes),sentirme alegre.Creo que por esa empatia que tengo con ambas.Me convierto un poco en parte de ellas.Siento su latido ,todo está vivo,con energía que me infunden con facilidad,¡Por eso me gusta tanto perderme por cualquier paraje libre de coches ,ruidos,barullos de gente que se mueve incesante de un lado a otro!.Me gusta el sosiego de las personas que me encuentro por los pueblos,sin prisas,amigables,confidentes de su vida.....¿La MAR?,¿La MONTAÑA?....pues si,...¡¡ LAS DOS!!.